Es muy significativo. Facebook reconoce tus “intereses”. Si pones “Me
gusta” en un determinado muro, lo relaciona y te empieza a presentar más
información de esa persona. ¿Qué sucede si has puesto un “Me gusta” por
compromiso, o por mantener un contacto, o por cualquier otro motivo
escondido? Pues simplemente que Facebook eso no lo sabe, de modo que
simplemente entiende que “Te gusta” aquello que apoyas, y te da más. De
modo que, si te dedicas a actuar por compromiso, por interés, o por
cualquier otro motivo escondido, te encontrarás rodeado de información
que no te interesa e, incluso, llegue un punto en que te moleste lo que
ves, pues en verdad tu corazón no deseaba eso.
La “red social” de la vida funciona exactamente igual. Cuando actuamos movidos por estos “intrusos”, entonces la vida reconoce a dónde estás poniendo tu energía, pero no reconoce tus segundas intenciones. Si actúas por compromiso, la vida te dará más opciones para actuar “por compromiso”.
Si actúas de corazón, limpiando los “intrusos”, las intenciones ocultas, verás que la vida te manda, igual que Facebook, más información hacia lo que verdaderamente quieres ver; pero para ello, por supuesto, es necesario que le des todo tu interés a lo que verdaderamente sientes en el corazón.
La “red social” de la vida funciona exactamente igual. Cuando actuamos movidos por estos “intrusos”, entonces la vida reconoce a dónde estás poniendo tu energía, pero no reconoce tus segundas intenciones. Si actúas por compromiso, la vida te dará más opciones para actuar “por compromiso”.
Si actúas de corazón, limpiando los “intrusos”, las intenciones ocultas, verás que la vida te manda, igual que Facebook, más información hacia lo que verdaderamente quieres ver; pero para ello, por supuesto, es necesario que le des todo tu interés a lo que verdaderamente sientes en el corazón.
Comentarios
Publicar un comentario